Con una marcha en la calles del centro de Monterrey y un mitin llevado a cabo en la Explanada de los héroes, bases del Frente Popular Tierra y Libertad y el Partido del Trabajo recordaron a compañeros muertos de manera trágica la madrugada del 18 de febrero de 1976.
La marcha fue encabezada por Alberto Anaya, dirigente nacional del Partido del Trabajo, acompañado de sus hijos y un grupo de compañeros del mismo partido y del Frente Popular Tierra y Libertad, portando una manta en la cual expresaban solidaridad y piden justicia para la maestra Lupita Rodríguez.
Con las proclamas «18 de febrero no se olvida» y «Esta marcha no es de fiesta. Es de lucha y de protesta», los contingentes de las distintas bases, así como uniones de comerciantes, taxistas y rutas de camiones, salieron de la plaza de Colegio Civil hacia la calle Ocampo para tomar hacia Zaragoza.
A su arribo a la Explanada de los Héroes, la coordinación pasó lista a Antonio Franco Hernández, Antonio Olivares López, Canuto Cruz Galván, José Ángel Nava García, Pablo Hernández Mata y Rubén Gutiérrez Aguilar, compañeros que murieron abatidos por las balas de la policía estatal.
Presentados los respetos con un minuto de silencio, tocó el turno a Pedro Bernal, quien hizo un recuento de esta tragedia «sucedida hace 42 años en la calle Aztlán y Zapata, en la que fallecieron seis compañeros y otros 17 resultaron heridos».
Concluyó el activista Ricardo Cantú: «Ya son 42 años y mientras latan nuestros corazones, seguiremos en la lucha».
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